Todos la conocemos, la criptodivisa, una nueva tendencia de moneda digital sobre la que aún se debate y especula y que no aparecerá en nuestras ajetreadas vidas hasta dentro de unos años. Las criptomonedas nacieron de Internet y la globalización.
No dependen del banco central y no son una unidad monetaria oficial comparable al dólar, la libra o el euro. Han tenido una presencia real desde su uso. Las criptomonedas se basan en las relaciones entre pares y funcionan según un modelo descentralizado, y aunque algunos países las regulan, no son de curso legal.
Fabio Panetta, miembro del Consejo Ejecutivo del BCE, cree que para 2026 el campo se abrirá a las criptomonedas para que haya muchas innovaciones y una mayor adopción. Teniendo en cuenta los diferentes papeles desempeñados por Christine Lagarde, se puede dudar de su sinceridad hacia el mundo del blockchain. La presidenta del Banco Central Europeo (BCE), Christine Lagarde, ha vuelto a pronunciarse claramente sobre las criptodivisas. En una entrevista en la televisión holandesa, expresó su preocupación por el hecho de que la gente invierta sin entender los riesgos y reiteró la necesidad de regulación. Dice que estos valores son extremadamente especulativos y de muy alto riesgo. Por otro lado, dijo que una moneda virtual, apoyada por el BCE, sería más bien una inversión de futuro. Si esta moneda virtual se desarrollara y funcionara con una tecnología similar a la de las criptomonedas, tendría valor porque sería creada y respaldada por el Banco Central Europeo. Tendrá las garantías que hoy sólo pueden ofrecer los bancos. Por el contrario, nadie puede ofrecer garantías sobre las criptomonedas. El precio del bitcoin ha caído recientemente un 20% en una sola semana, y actualmente se encuentra entre 28.000 y 29.000 euros. El gobernador del Banco de Francia, François Villeroy de Galhau, no piensa en ello. Recientemente comparó el bitcoin con la burbuja de los tulipanes en los Países Bajos en el siglo XVII.
El origen : www.butterword.com
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