Prendas únicas para acompañar a las mujeres en todos los cambios que afronta su cuerpo. Myrina quiere destacar que la inclusión no solo habla de colores o tallas sino que debe estar también basada en la diversidad y tratar así de acercarse a todas las mujeres a una realidad como es el cáncer de mama.
Por primera vez una marca de lencería propone sujetadores inclusivos que transforman el concepto de igualdad y al mismo tiempo permiten normalizar el cáncer de mama que afecta a 1 de cada 8 mujeres a lo largo de su vida.
Las creadoras de Myrina han decidido proponer un nuevo concepto de ropa íntima: sujetadores que nacen de sentir y escuchar las necesidades de muchas mujeres que han afrontado el cáncer, para ofrecer prendas que den respuesta a los diferentes cambios que viven sus cuerpos.
Las prendas que diseña la marca cumplen con características concretas que buscan cubrir la insuficiencia de opciones del mercado de lencería para el género femenino, para la diversidad de cuerpos y para las muchas situaciones de la vida que puede experimentar una mujer.
«Según los últimos datos recogidos por el Sistema Europeo de Información del Cáncer (ECIS, por sus siglas en inglés), en 2018 se diagnosticaron un total de 32.825 nuevos casos de cáncer de mama en España. Este tipo de tumor suele aparecer entre los 35 y los 80 años, aunque la franja de los 45-65 es la de mayor incidencia» (Fuente GEICAM). Por esta razón y con el fin de dar pasos hacia la normalización del cáncer de mama en la sociedad, para Myrina es importante que todas las mujeres puedan usar los mismos sujetadores, para empatizar con la realidad del cáncer de mama como una situación que no debe ser excluyente o mitificada.
Esto permitirá a las mujeres concienciarse respecto a la enfermedad y motivarse a conocer mejor sus cuerpos, a generar procesos de sonoridad y por supuesto a exigir exámenes, cuidados y garantías para todas.
Al mismo tiempo, las mujeres que han afrontado el cáncer también podrán encontrar alternativas cómodas, bonitas y funcionales que contribuyen a promover el desvelamiento del tabú social de esta enfermedad, expresado en historias, cuerpos y vidas reales.
Así pues, para Myrina hablar de cáncer permite sanar de manera individual y colectiva, respetando siempre los procesos de cada una de las personas que debe afrontarlo.
«Myrina apoya a la Fundación GEICAM»
Además de sus prendas y la motivación de concienciar a las personas, Myrina apoya a la fundación GEICAM donando una parte de sus ventas para la inversión en proyectos de investigación, con el fin de, lograr que algún día el cáncer de mama sea una enfermedad controlada y que, con prevención temprana y cuidados correctos, pueda curarse sin representar riesgos mortales.
Con su claim «un mundo de mujeres sin etiquetas – untaggedwomen» y su ideal de «cooperar para construir» se ubican en un plano en que todas las iniciativas y proyectos afines a la marca y su universo, les permite unir fuerzas para ir cimentando ese mundo de mujeres sin etiquetas donde «no son los senos, ni ningún raso de tu cuerpo lo que te hace más o menos mujer»; ni tampoco las etiquetas o estereotipos sociales en las que se suele encajar el género femenino.
«Así que, si tenemos pechos pequeños o grandes, estamos en lactancia o hemos vivido una mastectomía, con o sin reconstrucción, seguimos teniendo la libertad de sentirnos felices, sensuales, valiosas y sobre todo, mujeres».
Myrina es marca joven, innovadora y que huye de los parámetros de fast retail, con un concepto responsable que busca satisfacer necesidades y no crearlas. Por esta razón, sus producciones exclusivas a pequeña escala, buscan traer beneficios sociales en los entornos donde trabajan y hacen que cada colección y cada prenda sea única. Incluso cuando les es posible proponen a las mujeres que no encuentren alternativas iniciales para sus cuerpos, confeccionarles prendas a medida.
El próximo año presentará su primera colección de sol y agua, con trajes de baño para todas las mujeres y también con algunas colaboraciones sorpresa en sus colecciones.
«Myrina, un nombre de una reina amazona»
Myrina procede del nombre de una reina amazona, ya que la etimología vincula la palabra amazona con el significado de «sin-pecho» al explicar que estas guerreras se quitaban uno de sus senos para poder usar perfectamente el arco y la flecha, afirmando que ser mujer trasciende más allá de una imagen física.