Simone es una solución de movilidad para todos aquellos que quieren ahorrar tiempo. Sostenible y ecológica, se convertirá rápidamente en la aliada de los urbanos de prisa.
Diseñado por dos jóvenes, Simone es un scooter plegable presentado como el más ligero y compacto del mercado actual.
Los co-fundadores de los Scooter Simone eligieron este medio de locomoción en lugar de un skate-board, por ejemplo, ya que es accesible a un mayor número de personas. El scooter pesa solo tres kilos, se despliega en menos de 15 segundos y sustituye a un Ramette A4 una vez plegado.
Las piezas del scooter se fabrican en impresión 3D para piezas de plástico y metal. Una verdadera innovación en el mundo de los Nuevos Vehículos Urbanos. El scooter Simone ya está disponible y se puede reservar por 299€. El precio es un poco alto ya que corresponde a uno de los patinetes eléctricos más baratos del mercado, pero la tecnología y la ligereza del aparato tienen un precio.
Es un patinete ligero que cabe debajo del brazo. Como en los tubos de una sombrilla, las partes del mango del scooter encajan entre sí. Simone espera alejarse de sus competidores concentrándose en los pequeños trayectos, donde el scooter eléctrico es menos práctico. Para ser tan compacta y a la vez resistente, Simone está hecha de piezas muy técnicas, realizadas en impresión 3D para las de plástico y las de metal.
Simone puede deslizarse en una mochila, y al salir de su autobús, metro, tranvía o incluso de su coche, puede montarla en 15 segundos. Solo tiene que ensamblar sus ocho tubos de aluminio. Una pequeña revolución en la movilidad urbana, mientras que los scooter están en auge en todas partes en las grandes ciudades.
El concepto ha seducido incluso a algunas gendarmerías de Francia, que pondrán a prueba a Simone en el marco de la policía de seguridad de la vida cotidiana. Esto va a permitir poner los patinetes en el maletero, sacarlos fácilmente para patrullar, por lo que ofrece una verdadera libertad en el trabajo y otras perspectivas. Para evitar las degradaciones y la anarquía que se observan en las grandes ciudades con estos patinetes de autoservicio, los jóvenes ingenieros del Valenciennois propondrán máquinas en mojones. Sin embargo, seguirán siendo muy compactas para facilitar su almacenamiento y están pensando en instalarlas en los alrededores de los centros comerciales o en la parte inferior de los edificios.