Ahora estamos a las puertas de otro gran avance con la llegada a la producción de la memoria NAND tridimensional (3D). En los chips de memoria flash 3D, la superposición de transistores permite aumentar considerablemente la densidad de la información almacenada: en lugar de una sola capa de células de memoria, cada componente tiene 48 o más, apiladas como los pisos de un rascacielos.
En 2008, el número de fotos publicadas diariamente en las principales redes sociales era insignificante. En 2014, según Forward Insights, superó los 1.800 millones diarios. Esto explica en parte que la capacidad media de los smartphones se haya triplicado con creces en los últimos años, pasando de 5,2 GB en 2010 a 18,3 GB en la actualidad. Esto no evita que los usuarios se queden sin memoria.
La necesidad de almacenamiento de los consumidores aumenta cada día, lo que inclina la demanda. Por ello, las empresas hacen todo lo posible para satisfacer esta necesidad: así surgió la NAND 3D.
Gracias a los avances en el almacenamiento, varios terabytes cabrán fácilmente en la palma de la mano, mientras que un petabyte, o unos 1.000 años de música en MP3, podría caber algún día en el bolsillo.
Los desarrolladores llevan la innovación hasta el punto de saturación, y esto lo explica esta sociedad de "fast consumption" Con el ejemplo del vídeo 4K recién llegado, algunas empresas ya hablan de 8K en sus próximos productos.
El origen: www.journaldunet.com
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