Ballie es un pequeño droide con múltiples funciones que hace de asistente personal. Tiene forma redonda y se adapta a la mano como una pelota de tenis. Se pasa el tiempo rodando por el suelo, buscando acontecimientos en la casa. Como un robot de compañía, Ballie debe ayudar a su amo en las tareas cotidianas.
Ballie es un pequeño droide con múltiples funciones que hace de asistente personal. Tiene forma redonda y se adapta a la mano como una pelota de tenis. Se pasa el tiempo rodando por el suelo, buscando acontecimientos en la casa. Como un robot de compañía, Ballie debe ayudar a su amo en las tareas cotidianas.
Presumiblemente, podría abrir las persianas o reproducir música para despertarlo. Puede ayudar en el cuidado de las mascotas cuando los humanos están fuera, encender la aspiradora autónoma, hacer fotos de los acontecimientos de la casa y comunicarlos... Por supuesto, esto implica que los dispositivos que gestiona también deben estar conectados. El dispositivo tiene una cámara y parece tener un sistema de reconocimiento facial. Esta función puede permitirle identificar a los intrusos cuando el propietario está fuera de casa, de forma similar a una cámara de vigilancia.
La ventaja es que el dispositivo nunca se queda en un lugar, ya que es móvil. Por lo tanto, sólo necesitas una Ballie para disfrutar de una amplia vigilancia.
Si la cámara detecta basura en el suelo, Ballie puede poner en marcha el robot aspirador. Y como es móvil, puede localizar las necesidades del propietario en cualquier lugar de la casa.