La autora de este sueño hecho realidad se llama Nzambi Matee, una joven keniata, quien, con apenas 29 años de edad, ha constituido una empresa cuya materia prima principal es el plástico, uno de los materiales más contaminantes del planeta.
Ahora el plástico. pasa a ser una alternativa sostenible para el sector de la construcción en Kenya, sus compatriotas keniatas adquieren los ladrillos de plástico a un bajo costo, dando un giro de 180°, al convertir un problema, en una solución constructiva.
La segunda y más vidas del plástico
La joven empresaria keniana Nzambi Matee, ha explicado que su idea fue inspirada en la ecologista Wangari Maathai, premio Nobel ya fallecida. Gjenge Makers, nace entonces como fruto de un arduo trabajo que ha rendido sus frutos, materializándose en la creatividad de Nzambi Matee quien, con sus adoquines, no solo se fabrican casas, sino la esperanza de un mundo mejor, más limpio, libre de contaminación.
Nzambi Matee controlando su producción
Una alternativa de solución contra el cambio climático
La contaminación del planeta arremete cada vez con más fuerza, afectando a la vida en sus diferentes manifestaciones. El uso indiscriminado y mala disposición de los desechos plásticos se hace más evidente en los océanos, ya que, según la ONU, más de 13 millones de toneladas de este material terminan en el mar, afectando muchas especies cada año.
Cabe destacar que, según cifras de esta organización, apenas un 9% de este material contaminante es reciclado a nivel mundial. Esta cifra resulta muy preocupante, más, si se tiene en cuenta que el plástico tarda más de 150 años en degradarse. Durante este tiempo, sus impactos negativos continúan dañando, en la mayoría de los casos de forma irremediable, a los ecosistemas marinos, con su consecuente daño a las especies que habitan en él.
En este sentido, el proyecto de Nzambi Matee, fue galardonado en el año 2020 con el premio Jóvenes Campeones de la Tierra de la ONU, por su valioso aporte al planeta al haber transformado más de 20 toneladas de plástico en adoquines, disminuyendo además el problema climático que afecta al planeta en su totalidad.
Cómo nace Gjenge Maker
Ante semejante panorama, Nzambi Matee, cansada de ver que no se hacía nada para buscar soluciones al problema, decide aportar una solución en su localidad, ayudando a reducir la contaminación por plástico. Es así como en el año 2017, encontró una solución sostenible y crea Gjenge Maker; una empresa que se dedica al reciclaje de plástico, convirtiéndolo en un producto básico para la construcción, nacen así “Los ladrillos o adoquines de Gjenge Maker”. Cabe resaltar, que Gjenge es una adaptación de la palabra “suajili jijenge”, que significa "constrúyete a ti mismo", no pudo ser más adecuado el nombre para este magnífico emprendimiento.
Grandes soluciones con materiales simples
La emprendedora keniata explica que para elaborar sus ladrillos solo mezcla arena con diferentes tipos de plástico como el polietileno, el cual se recolecta en las bolsas de cereales y otros productos que venden en los supermercados. De esta manera, la materia prima proviene principalmente del reciclaje y en algunos casos reciben la donación de estos desechos plásticos de algunas empresas.
Con este proyecto, recicló más de 20 toneladas de residuos plásticos en su Kenya en el año 2020, subiendo a 50 toneladas para finales del 2021. En diciembre del 2020 a esta iniciativa se le otorgó el premio “Jóvenes Campeones de la Tierra de la ONU”, donde se exaltó la labor Nzambi por desarrollar un material de construcción alternativo, completamente sostenible, asequible, y por promover la cultura del reciclaje en su país, Kenia y África.
En la actualidad, Gjenge Maker está produciendo más de 1.500 ladrillos al día y su producto tiene otra característica particular: es siete veces más resistente que los ladrillos de hormigón. Para finales de este año 2022, su visón es aumentar la cifra a 5.000 adoquines por día, lo que permitirá cubrir la demanda actual.
¡Su problema es la oferta, no la demanda!
El principal problema al que se enfrenta Gjenge Maker es de oferta, no de demanda. Es un buen problema, sin embargo, es un problema que necesita ser abordado seria y rápidamente, ya que de eso depende su credibilidad en el sector. Por esta razón en Gjenge Maker se están desarrollando máquinas más rápidas, eficaces, que permitan mejorar la capacidad de producción.
Nzambi Matee, quien se formó en física, geofísica y ciencias naturales, hoy por hoy se inclina más por las ciencias naturales, es autodidacta en ingeniería mecánica e hidráulica, y por eso terminó dirigiendo esta innovadora empresa de adoquines, tiene dos ambiciones en la vida: aportar soluciones prácticas a la construcción y contribuir a la conservación del medio ambiente, afirma que Gjenge le permite cumplir sus dos grandes dos ambiciones.
Yoleiza Acosta