Inventor: Francisco Pedro Bernat Mazón
Biografia:
Si se tiene en cuenta que por un lado está el hecho de que me considero como una persona creativa, y por otro el que desde que yo recuerde siempre me llamo la atención la cultura científica y técnica, se podría pensar que el resultado de la suma de los dos términos anteriores daría como resultado “inventor “. Sin embargo y quizás debido a otros factores externos, que en la reflexión anterior no he tenido en cuenta, esto no solo no ha sido así, sino que en mi caso el hecho de inventar ha sido más bien una actividad, que se ha quedado siempre relegada a un segundo plano en forma de simple afición. Claro que ahora, una vez jubilado y con algo más de tiempo disponible, he pensado que este podría ser el momento de desempolvar algunas ideas ya casi olvidadas, como son el calzo publicitario para estabilizar mesas, o el motor a reacción sumergible por ejemplo.
Invento:
El Reactor que se propone es un motor a reacción que funciona bajo el agua y que incorpora los elementos necesarios, como para que también pueda funcionar fuera de ella de la misma forma que lo haría un motor a reacción aéreo convencional.
De lo anterior se desprende que los Motores a Reacción Sumergibles serían adecuados para proporcionar la propulsión de aquellas naves acuáticas que requieran de una mayor rapidez de desplazamiento que la que les podrían proporcionar los sistemas de hélice o de turbinas actuales. En este sentido, la principal y más obvia aplicación de este tipo de motor sería la de propulsar a altas velocidades a los submarinos que así lo requieran, si bien no se descarta su uso como propulsores de todo tipo de embarcaciones, naves o vehículos con imperativos de rapidez, tengan o no tengan vocación anfibia o de tipo tierra-mar-aire y ya sean de diseños existentes o ya sean de diseños específicos para obtener el máximo de posibilidades que los Motores a Reacción Sumergibles pueden entregar.
Así pues, los Motores a Reacción Sumergibles presentan una buena flexibilidad de criterios para su instalación ya que, a semejanza de lo que ocurre normalmente en la actualidad con los aviones comerciales, estos pueden ser acoplados de forma externa al casco, lo que permite que puedan ser instalados en cualquier tipo de embarcación sin que para ello se tenga que realizar modificaciones significativas en el diseño original de la nave, a menos que se prevean funciones añadidas, que se quieran conservar las ya existentes en el diseño original de la nave o que se quieran suprimir otras, como por ejemplo en lo referente a la hélice original de propulsión, que se puede eliminar para liberar peso y espacio o se puede conservar ya sea con fines de ahorro de costes o ya sea para adoptarla como sistema de emergencia si así se desea. La flexibilidad en la instalación también se refleja en el número de motores instalables en una misma embarcación, ya que esto es un factor que puede adaptarse a las necesidades de la potencia y velocidad que se pretendan atender en función de la potencia nominal de los motores de que se dispongan.
En el dibujo adjunto se muestra la representación artística de un submarino al que se le han acoplado dos Motores a Reacción Sumergibles por debajo de la línea de flotación y otros dos por encima de la línea de flotación a título de ejemplo sobre las posibilidades de instalación que ofrece el Motor a Reacción Sumergible, aunque en aras de la simplicidad en esta breve presentación, además de obviarse otras ventajas añadidas que los Motores a Reacción Sumergibles pueden ofrecer, también se han obviado representar algún tipo de protectores frente a posibles impactos de objetos de un cierto tamaño, ya que la resistencia de los materiales y el diseño de estos motores deben calcularse para soportar el impacto y/o “digerir” la gran variedad de impurezas y residuos de pequeño tamaño que pudieran encontrase en el mar.
Por otro lado y aunque resulte obvio también es de observar que, afín de obtener una mayor fiabilidad de maniobra a altas velocidades, se ha optado por acoplar los motores preferentemente en la zona delantera de la nave y no en la zona trasera.